Hoy viendo llover desde mi ventana, vuelvo a recordarte. Recordar esa tarde en que bajo la lluvia conmigo te encontrabas, sentir la ropa pegada a tu cuerpo, y vislumbrar la candente figura que bajo ella mostrabas. Tenerte asida a mi torso temblando de frío, refugiándote en mí, con tu tierna mirada, mientras yo, maliciosamente de mil formas te imaginaba. Escucharte decir: ¿qué haríamos? pues nos encontrábamos lejos, en una calle solitaria, y yo sin prestar atención a tus palabras, imaginaba que me pedías que tan solo te amara, que deseabas ser mía, mientras de mi de abrazabas. Se acercaba la noche, la lluvia arreciaba y tú solo atinaste a decir: menos mal que estoy contigo, mi mejor amigo de la infancia.
¿Porqué algunas veces a mi mente vienen relatos como éste?, relatos que aunque no tienen nada que ver conmigo, vienen cargados con un poco de erotismo, aún sigo preguntándomelo, jajaja. Eva Luna…
Sin duda la nostalgía invade tu corazón, tienes bellos momentos y es por eso que los recuerdas, ... Un beso preciosa, hace mucho que no nos saludamos,eh?
ResponderEliminarHay momento de inspiracion que ni siquiera nosotros entendemos, pero es tan rico cuando la nostalgia embarga cada rincón de nuestra alma y nos dejamos llevar por las sensaciones que se mueven en las profundidades de nuestro corazón. Me ha gustado mucho señorita. De paso, disculpa la ausencia, fueron días complicados, pero ya estamos de regreso, un abrazo!!
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